9 de julio de 2013

El reloj de mi vida II

Tengo lunas que  giran en mi cabeza atraídas por la gravedad infinita de mis pensamientos acorralados hace años,
descuartizando astros misteriosos como preguntas de existencias que aún no elaboro,
planetas de gigantes posibilidades de vidas y horizontes cargando rutas que no defino como noches ausentes de caminos y faros que alumbren a la nada mas vacía,
aquella mía y de la soledad que algunas estrellas me recuerdan con el susurro bastardo de la muerte que acompaña el aletear de miserables palomas de recuerdos y alucinaciones escalofriantes como parques  ausentes,
arboles gigantes a la manera de guardianes proféticos que guardan mis recuerdos encantados  con los astros mas lejanos,
perdidos en el tiempo como las llaves de mi consciencia camuflada en vinos misteriosos y lagunas cargadas con fantasmas a la manera y símbolo de la luna que desemboca en mi atadura con una historia histérica,
confines del mundo galáctico penetrando en mis ojos transparentes como copa vacia de amores olvidados,
galaxias camufladas con abrazos que solo  inventan el despertar de una pieza olvidada por los celestiales personajes que me escupen a mi cansada y destruida cara,
 cadia dia en que mi ruta se desplaza  algunos kilómetros y horas que se borran de mi estructura platónica.

Tengo a Goya vigilando mis madrugadas a manera de gato espía con sus ojos de linterna desconfiada,
 tiritando de duda bajo un poste rancio de nostalgias y cansados ojos de realidades asustadas,
panes humeantes cada dia mas lejanos por conclusiones mentales irreconocibles para un pasado absuelto por mi critica desnuda…
esta luna me interroga cada noche…y no se que mascara presentar…

solo respiro y miro el reloj gigante sobre mi vida.