30 de octubre de 2007

UN MINUTO DE SILENCIO EN HOMENAJE AL MAR



I
Y es que hoy la descubrí, el viento, el ruido, la luz, me mostraron la inmensidad, allá en el horizonte se encuentra, perdida entre pequeños barcos; los faros, linternas giratorias muestran el camino al mar tembloroso, estampando en sus rocas pequeñas risas de señor encantado, ¡abran esos enormes ojos ante la tempestad pronunciada, trepando a lo infinito de la hermosura!; Uds. gaviotas viajeras ¿conocen la inmensidad de aquellas lejanías? Aquel que viene ahí es el mismo que ha salido victorioso con su corazón abierto, mientras las luces apagan y prenden su esperanza fúnebre, ¡ mostremos nuestro monumento al mar!, con recuerdos mirándonos de reojos, encendidos de nostalgia; Heme aquí plasmado como quien no conoce estos rumbos, como quien teme a estas lejanías ileales; este es aquel que trae noticias del horizonte confuso, aquel que desafió las lejanías hermosas y amate de las gaviotas, el que deja caer su lápiz lentamente frente a sus ojos ¿abre esos enormes ojos! Y recorramos en medio de olas, busquemos las sirenas perdidas en la tormenta, te invito una taza de café, dejemos que el tiempo nos haga tiempo.

II

Habla de mi a los pájaros, a los vientos y muestra mi sufrimiento; ¡tanto tiempo!, ¡tanto tiempo perdido!, tiempos de lejanías donde no reconocí la inmensidad para mostrarla en estas tinieblas y preguntar así por nuestro pueblo… ¿has conocido a nuestro pueblo?, ¡atentos todos! Tengo la llave que abrirá mil parpados que derramaran sueños al igual que sangre ¡tanta sangre derramada! ¡Tanta lluvia de sangre en nuestras casas!
En los caminos han de haber mil muertos y mil caminantes dispuestos a sembrar lagrimas para luego cosechar triunfos no esperanzas…¡tanta esperanza perdida!, esperanza de tiempos perdidos, esperanzas convertida en sangre, habar de mi a los discípulos, a los santos y maestrales el rostro desamparado del viento, de los paseos en el desierto…¿recuerdas los paseos en el desierto?, donde caminábamos, con traición y sin dios que mirar.

III

Atrás de la luna, donde se esconde el dolor de los hombres, el extranjero llego descalzo y lleno de roció, gritando fantasías como loco para calmarlas dolidas bocas de fantasmas y astros en constelaciones que al caer giraban en su ser hasta desvanecerse en el tiempo, fue entonces cuando el extranjero se sintió dueño del dolor humano y su cabeza lo llevaba a una cordillera mas alta que la luna, para que desde la cima del mundo besara los corazones putrefactos de ciertos profetas que lloraban hasta la locura creando este mar agredido, furiosos como los amos del olimpo , con aguas y profundidades como selva espantosa, llena de constelaciones y un tiempo inmóvil colgándolo de un




péndulo y gimiendo a media noche en esta geografía de aire, lluvia y tempestades, haciendo que la ausencia se eleve hasta el fin del mundo y nos haga transparentes . el extranjero se dedico a contemplar aquella belleza escondida en alguna parte del alba, girando impaciente hasta el punto de la destrucción de todos sus átomos por que su vicio era la nada, acercándose hasta la punta de la desaparición que hoy es un abismo espantoso, donde cuelga una mujer que arma y desarma el mundo con sus ojos parpadeantes y sus lagrimas no son mas que el arrepentimiento del mundo por traiciones de profetas adictos a la mentira, adictos al mar y a sus aguas llenas de traicioneras olas, con seductoras risas y gemidos allá a lo lejos en puertos y espantosos y lleno de lagrimas de oro para regalar a los hombres escondidos tras la luna , en galaxias vacilantes como mosca a la mitad de la noche o gotas putrefactas que atacan al mar exaltado y confundido por su propio rostro que diluye al extranjero a causa de tanta belleza escondida tras el océano putrefacto y cargado de licor negro para cuando salga la luna por los hombros cansados de cordilleras monumentales como ciertos edificios negros, como el rostro oculto y oscuro de un verdugo dispuesto a cerrar un capitulo con el filo de pluma, que es la envidia de todos los puñales y cuchillos que habitan una ciudad encantada en la madrugada y podrida al final del día.


IV


En el ocaso cuelga una mujer degollada por que el tiempo se lo dedico entero a fantasmas que iban borrando su paso, eran profetas de un dios llamado locura, que habita en copas espantosas en la madrugada y que al alba mueren lentamente por que el extranjero había comenzado su paso y anciano había encontrado un camino alrededor del mundo y un día quedo espantado por la putrefacta mujer que colgaba del abismo terriblemente hondo, terriblemente rojo, como si todas las palomas del mundo fueran a morir ahí y su sangre fuera el vino asqueroso, con profundidades que llegan a la nada mas negra del universo, en ese lugar el extranjero se hecho a llorar como si el cadáver fuese el mismo, golpeo sus puños hasta cerrar este abismo y despertar a esa mujer muchos años muerta, como flor marchita, la mujer abrió sus ojos y el mundo comenzó a caer a pedazos de una carne espantosa, entonces el extranjero sintió su ceguera , la comprendió hasta el desequilibrio de su propia alma y sus lagrimas lavaban los pies de discípulos de un dios maldito, por que el arrepentimiento de los hombre se convierten en gotas rojas , como si cayeran del abismo mas hondo del mundo, gritando escandalosamente como que quisieran despertar a semillas muchos años dormidas bajo el suelo erosionado , co0mo pájaro ciego o buque nostálgico, como ser o cosa que grita como loco por comprender este abismo que parece una taza de café en medio de la tormenta con gotas sulfúricas y olor a soledad en vientos que desata esa mujer que cuelga de la luna.

29 de octubre de 2007

SUPE DE UN MUNDO DIFICIL.

Supe de un mundo que era difícil,
como también alucine con la esperanza de cambiarlo y descuartizar algunas fantasías que las supe inútiles al momento en que me hicieron tiritar la pera de mi rostro ya cubierto de llantos y mas llantos,
de una pena incansable en mis ojos que se hacían cada día mas viento y nubes,
supe de la ausencia,
de tus recuerdos y tus pechos sobre mi pecho de acero,
de piezas con techos gigantes y otros mas pequeños,
de mi velador cansado de guardar recuerdos y mas recuerdos de un pasado que ya no vino mas,
ni alegrías ni sueños,
esperanzas ni futuros.

Supe de un mundo que era difícil.
Puertos cansados,
atroces, putrefactos con la orina de la humanidad deshumanizada,
escaleras con tus manos,
con tus pies y ojos,
estrechas y altas hasta el cielo que nos prometía mantenernos en ese momento.

Supe hoy de mis recuerdos,
pájaros silenciosos,
ángeles perfectos,
alegrías gigantes versus el peso de mi mochila llena de errores.

Comprendí ahí un mundo difícil,
ojos silenciosos,
recuerdos que hacen tiritar mi pelo,
nublarse mis manos y crecer mis uñas,
buscando la estrella que cuelga de la luna,
una visión abstracta como mi bigote forzado,
castigado como mis brazos,
mis dudas extranjeras,
ajenas de mis fracasos.

(Podría estrecharte un rato hoy, cuando comprendí un mundo difícil)

Recordando algunas calles y plazas,
camas y cuartos,
encontré tus palabras,
encandilan, brilla una ausencia necesaria,
noches lluviosas,
espantapájaros con olor a distancias calidas,
tus palabras camufladas
y mi recuerdo en la mirada.

(Asumí ahí un mundo difícil)

Me has mirado desde años distantes,
mi bigote ha crecido,
mis uñas extendido a muchos cuerpos,
pero tu cosmos, has permanecido intacto,
tus constelaciones,
tus estrellas apagadas,
luceros escondidos en tu cuerpo inmenso,
negro,
universo incansable en el observarnos,
conociéndonos como si fueses nuestra madre,
anciana, con sus pasos peligrosos,
hay tantas estrellas en el cielo que mi alma no las cuenta, solo asimila la identidad pasajera de las que aun cuelgan de sus recuerdos....

RECUERDE

Y encontre la molestia en mis zapatos añejos de tanto camino oscuro y sin sentido.


te acuerdas.....era noche, habian cervezas y cigarrillos clandestinos, habia sueños a la sombra de un arbol casero.

Lo recuerdas, esa noche extraña, en la cual habitamos unos instantes con personajes tan extraños como tu nombre.

Como podriamos olvidarlo, al menos los hechos curiosos los tengo claro, los momentos mas importantes tambien, quiza algo olvide que tu recuerdas, pero lo que tengo claro....es que fuimos complices de nuestros ojos que nos hicieron mirarnos y tomar la decision.

Aun lo recuerdo, como si habitara en ese instante.

27 de octubre de 2007

QUE MAS TE PUEDO DECIR

Que más te puedo decir

Que mas te puedo decir, las cosas que me van quedando entran en mi velador de cenizas y colillas gastadas por el tiempo melancólico, acumuladas colillas de cigarrillos que tiñen mis dientes dormidos con su nicotina asesina.

Mis amadas cosas que caben en mi velador cubierto de polvo, de uñas cortadas por el machetazo mágico de mi instrumento clandestino, mis cosas silenciadas con el recuerdo de mi muñeca castigada, con la mirada oculta del tiempo perdido.

Pido hoy tu silencio vacilante, tu silencio de galaxia y estrellas nerudianas, acabó hoy mi carrera desesperada a tus ojos nubados por la disolución hambrienta de nuestras carreteras gigantes y camufladas por mas túneles de tiempo gastado en otras profundidades perseguidas, aquellas que el mar no contiene en su inmensidad apuñalada y distantes como mis manos esta noche.

La noche pasajera y asesina que castigo con mi borrachera trágica, la noche oculta de tus sueños perseguidos esta noche de mierda que gatea como puta clandestina, la noche primera, esa sin fantasías,
sin recuerdos,
aquella sin pasajes oscurecidos y ocultos de tus ojos delirantes,
tus ojos que guardo en mi bolso de pasajero y extranjero en las tierras donde nunca mas me despertara la neblina agobiante de tu presencia ambigua,
de tus manos distantes,
de tu alma extendiéndose como antes.

22 de octubre de 2007

AUN TE RECUERDO



Entro al bar cerca de plaza brasil contigo, firme y decisivo.
Levanto el brazo y pido una cerveza para discutir la posibilidad de dejar de mirarte,
tú me respondes moviendo tu cabeza y cuello recordándome la falta que me haces y me convences de no dejarte.
Salgo de ese lugar y me dirijo al puente de santa ana,
miro las luces que pasan por la carretera y me dices, ven conmigo,
entonces con decisión,
salto al vacío y me recoges entre tus brazos recordando en un segundo mi vida.
Fue solo un sueño, lo juro.

9 de octubre de 2007

ME PREGUNTO



Me pregunto

¿Y si todo fue mentira,
los muertos, las torturas, la causa?

Yo me pongo de rodillas y grito mi rendición incondicional.

Pido respeto,
exijo seguir siendo un país cagon,
una mugre en el zapato para la unidad de los pueblos latinoamericano,
¿Qué mas sangriento e inquisidor que aquello, despojarnos de lo que nos tradujo la miseria de la memoria?

Señores de mi generación,
por miedo a la verdad,
exijamos que nos sigan diciendo lo mismo,
no digamos ni pió respeto al pasado, ni al presente y mucho menos, escuchen bien, mucho menos respecto a los campos de concentración,
Salvador Allende fue un combatiente caído,
que enfrento a las fuerzas armadas con el regalo del presidente Castro,
suicidio o asesinato eso da igual,
que eso no se cuestione.

Todo paso por que en esos tiempos amábamos los extremos y colorin colorado este cuento se ha acabado.

3 de octubre de 2007

MI SILENCIO NO ES SU SILENCIO


Mi silencio no es su silencio,
mi noche es como algo que se agita dentro de las tumbas y el desierto,
clandestinos pasos,
cunetas sucias y laberintos ilegales.

Mi noche no es su noche,
la distancia inunda valles de antaño que se despiertan con ruidos y maquinaria espantosa como mis lagrimas esta tarde,
plazas incrédulas del tiempo,
permanentes como vicio maligno,
bello y acogedor.

Mi noche secreta,
madrugadas de fantasías y combates callejeros,
mañanas camufladas bajo mantas de recuerdo y soledad.

Camas gigantes,
camas distintas y tecnología cómplice.

Duda,
mi duda no es la misma que su duda,
estrellas de recuerdos,
trenzadas entre caminos y extravíos que hacen tiritar mis ojos y uñas,
estamos ciegos,
somos sordos de la vista,
ciegos del oído confuso.

Cunetas de olvido,
sombras de miedos y recuerdos,

Estamos rotando bajo el mismo sistema.

1 de octubre de 2007

BATALLA


Tengo una batalla de mariposas luchando por la soberanía de mi corazón abatido por el tiempo y el viento que distorsiona mis pasos y mis ojos silenciados, desmoronan el mundo ancianos de la vida y las vidas angustiosas de estos fantasmas que revientan al mundo con su mágico despertar y atardecer tinto y copas destruidas, caídas en el combate de la existencia y negación transparente de mi promesa incumplida. Hay distancia en mis ojos y manos absurdas que juegan a buscarte donde no estas, trajinando el mundo para encontrarte en algún camino desierto sin corazón, sin sangre, ni manos ni pelos que antes se extendían y salían a mi encuentro como niño desesperado, caminando voy, recorriendo estrellas colgadas de las lunas y algunos astros que se esconden dentro de tu pecho clandestino. Admito la imprudencia de escribir sin sombras que vigilen mi vida, aquella que vivo y muero, ojos hinchados de cólera, rojos de sangre y rabia, mis manos que tiritan por la belleza que me abruma y asusta con sus promesas de invierno y proyecciones de una realidad incompetente.